Vibra la tribulación mordaz oxidando mis venas
Inhalo el rencor que emana de la puerta infernal
Maleficio de una vida ultrajada en el infecto vestíbulo
Escupiendo la pútrida verdad con labios embelesados por la ira
Los años nunca supieron develar el misterio de mi aura adolecida
Radiante agonía al contemplar mi reflejo vertido sobre un cristal
Abrumado por las extasiadas sombras, huéspedes del recinto sombrío
Buscamos como lavar nuestras penas en las aguas de un enrojecido mar bravío
Vesánico invierno incitas el fatídico deseo remeciendo mi gélido corazón
Consumiendo el quebranto empozado sobre carne lacerada
Degusto la insípida consunción de mi alma languidecida
Al contemplar un cielo grisáceo expulsando una lúgubre melodía
Vomitado del paraíso y padecer sobre este albañal
Señalan el renegrido génesis de un macabro final
1 comentario:
que buen poema locus!!
me encanto... ya sabes como son esas cosas...
cada vez escribes mejor :p
nos vemos en la ruta
dark blessings
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